ABSTRACT
Tras el estallido de la burbuja inmobiliaria y el agotamiento de un modelo de acceso a la vivienda basado en la propiedad como inversión, y ligado al aumento de precios por la constante expectativa de revalorización, la situación de emergencia habitacional por la que atraviesa España, ante la falta de acceso al crédito, queda reflejada ante la paradoja de la proliferación de situaciones de “gente sin casas” y “casas sin gente”.
Ante la falta de respuestas a una ciudadanía con problemas crecientes de exclusión social, víctimas de desahucios, desalojos y en general inmersa en situaciones de precariedad, hacinamiento e inseguridad residencial, las protestas de movimientos ciudadanos organizados han proliferado en nuestro país, protagonizando acciones en defensa del derecho a la vivienda que, por su calado social, han servido como impulso para la aparición de las primeras medidas políticas dirigidas a dar respuesta a las demandas ciudadanas a través de la puesta en uso de la vivienda vacía existente.
La presente comunicación, partiendo de este contexto, tratará de analizar cuáles han sido las medidas legislativas en materia de vivienda puestas en marcha en nuestro país durante los últimos años para, a partir del marco de las políticas de vivienda desarrolladas en entorno europeo en esa línea, determinar el grado de éxito de las mismas, a tenor de su capacidad para dar respuesta a la demanda social y servir como germen del necesario cambio de modelo residencial español.
Para ello nos centraremos en el estudio de tres comunidades; Andalucía, Cataluña y País Vasco, en relación a las medidas de ámbito nacional, para poder concluir cuáles han sido sus aciertos, qué carencias presentan, qué dificultades han encontrado y qué líneas de oportunidad deberían fortalecer para afianzar, a largo plazo, un modelo estable de acceso a la vivienda al margen del lucro.